¿Porqué dar gracias? Cuando lo sepas no dejarás de hacerlo siempre
La vida, Dios, la fuente, la energía, el Universo -como le quieras llamar- nos da lo que pedimos y más, a pesar de eso somos más dados a pedir que a agradecer.
Agradecer es un hábito que debemos cultivar diariamente y en cada momento que podamos. Así como lavarnos los dientes mínimo tres veces al día para evitar las caries.
Como sabiamente dijo William Arthur Ward: “sentir gratitud y no expresarla es como envolver un regalo y no darlo”.
“Gracias” es definitivamente una palabra bien corta con tanto poder que si nos enfocamos en ella la vida nos puede cambiar.
Contaba una paciente: "Al hacerlo empezó a llegar hasta más de lo que yo creí podía aspirar y no me refiero solo a lo material, de hecho eso pasó a segundo plano."
Muchas de las cosas materiales que tenemos, de las situaciones que vivimos, de las bendiciones que la vida nos concede, damos por un hecho que las tienen todos y eso no es así, por lo que se nos olvida agradecer.
En un escrito decía: “Gracias, qué mágico poder lleva consigo. Poder; que sin saberlo es la llave que puede liberar una energía inusitada para el que la usa. ¡Sí...! cuando decimos gracias, estamos reconociendo el bien y aunque no nos demos cuenta de ello, estamos reconociendo el Bien absoluto, ya que todo bien viene de Dios, o es Dios”.
“Si al decir gracias, hacemos conciencia de este hecho, estaremos dándole un factor multiplicador a nuestro crecimiento, liberando tal cantidad de energía que no cabrá en nuestro pecho, estaremos dando gracias con un sentimiento de eternidad, con una conciencia de liberación y en una conciencia divina.
Practiquemos la condición de dar gracias conscientemente, viendo el bien absoluto del Padre en toda acción”.
Todos recordamos que Gracias es una de las primeras palabras que se nos enseña de niños cuando apenas aprendíamos hablar y a interactuar con el mundo, porque expresar gratitud es más que simplemente buenos modales.
Estar agradecido puede mejorar nuestras relaciones, bienestar y atraer más bendiciones a nuestras vidas.
Cada persona con la que interactúas te ofrece una gran cantidad de bendiciones en tu vida, bendiciones por las que debemos estar agradecidos.
La Kabbalah enseña “que dar gracias de todo corazón crea más Luz para el mundo; ya sea que muestres tu gratitud con un abrazo, una nota, un apretón de manos, un regalo, un pastel o una sonrisa, la persona a la que estás agradeciendo no sólo te asocia a esa Luz, también siente que ha hecho una diferencia en el mundo y es más propensa a hacer lo mismo por otras personas”.
El líder espiritual de la Kabbalah, Yehuda Berg sostiene que “No se necesita mucho para agradecer a quienes nos ayudan o hacen nuestros días un poco más brillantes.
Pero, ¿Qué ocurre con las personas que nos retan o nos presionan a examinar nuestros defectos? No es fácil ver los retos como bendiciones. A menudo culpamos a los demás por hacer difícil nuestra vida o por bloquearnos el camino a lograr nuestras metas, sin embargo, quienes nos retan también merecen nuestra gratitud. Quizás te preguntes, ¿Cómo es posible agradecer a quién me quita mi puesto en el estacionamiento? Ya sea que nos ayuden al darnos exactamente lo que queremos o al forzarnos a crecer a través de la superación de un obstáculo, aquellos que nos ayudan son canales de Luz, a veces es difícil creerlo pero es así. Si olvidamos mostrar gratitud, estamos cortando nuestra conexión con la fuente de más bendiciones”.
Cuando los profesores de psicología, Robert A. Emmons y Michael E. McCullough, estudiaron la relación entre la gratitud y el bienestar diario, pidieron a algunos estudiantes que hicieran un diario de gratitud. Cada semana los participantes escribían cinco cosas por las que estaban agradecidos, sus respuestas no tenían que ser largas, una frase bastaba. Después de un tiempo, aquellos que escribieron en el diario se sintieron más optimistas, felices y comprometidos en más actividades que aquellos que no tomaron nota de las bendiciones semanales.
Hoy, aquí y ahora mismo, haz un recuento de todas las bendiciones que has recibido a la largo de tu vida y de las que ahora mismo tienes: sobretodo que tu corazón palpita, un gran milagro que damos por un hecho que meremos y que en realidad es un regalo, que además nos dice que estamos acá por algún motivo, porque tenemos un propósito, y que gracias a ello, con esfuerzo y dedicación, con paciencia, sin importar lo que esté pasando en nuestras vidas, las situaciones que estemos enfrentando o las circunstancias, podemos avanzar hacia nuestros objetivos, lograr nuestros sueños y ser plenos con actitud, controlando nuestros pensamientos y sabiendo que tan solo viviremos el producto de nuestras decisiones.
En los decretos:
Esta es una técnica recomendada para hacer afirmaciones o decretos.
Debemos trabajar nuestra frase, repitiéndola 3 veces cada vez que se diga, totalizando 9 veces durante el día.
Este proceso se debe hacer durante un mes:
1.- Al levantarse, repetir 3 veces la afirmación o decreto.
2.- A medio día la repetiremos 3 veces más.
3.- Por la noche, repetiremos nuestro decreto otras 3 veces.
Todo lo que se decreta 3 x 3 = 9 = Manifestación. Toda afirmación-decreto trabajada durante un mes, ¡acaba por cumplirse!, esto debido a que se está creando su vibración previa en el astral, gracias a la vibración de nuestra Voz y Mente.
¡Gracias Gracias Gracias! ♡
Comentarios
Publicar un comentario
¡Gracias por contactarnos!